Con Nosotros, NO. Entre Nosotros, NO.
Qué mejor recuerdo de la Dictadura o del Nazismo que el ruidoso silencio cómplice de tus conciudadanos, aquellos que con su defensa fanática han violado las causas nobles y tergiversado la ética del respeto, hasta el límite de callar la violencia que mata desde el poder.
Defienden solo sus intereses privados, su ideología totalitaria, usando la idea del “otro” como una cosa más, como un rehén más de su propia miopía, egoísmo y odio no elaborado (en algunas casos, no tratable).
El silencio de un conciudano frente a la injusticia y el dolor del prójimo es el más doloroso, el más incomprensible, es ese que nos deja atónitos e intenta robarnos el sentido de la convivencia colectiva y la creencia en la esperanza.
Somos muchos los que tenemos los recursos éticos y emocionales para resistir a esa dolorosa negación y a ese intento de secuestro primordial: el de nuestra libertad, el nuestro criterio de realidad, el de nuestra dignidad y nuestros valores republicanos.
Dolor e impotencia frente la celebración instrumental del robo, del secuestro y de la muerte que la asociación ilícita que nos gobierna realiza, incluyendo dinero y espacios públicos. Deliberada, engañosa y maniquea provocación a mantener abiertas las heridas de nuestra historia.
El silencio de un conciudano frente a la injusticia y el dolor del prójimo es el más doloroso, el más incomprensible.
Hoy quiero declarar, nuevamente y junto a otros “Nunca Más”, y con el prólogo original de Ernesto Sábato, cuya teoría sigue vigente y el que preserva el espíritu de los verdaderos héroes de nuestra recuperada democracia, los que se jugaron la vida: Alfonsín, Strassera, Sábato, Favaloro, Klimovsky, Ruiz Guiñazú, Fernández Meijide, entre otros (sin olvidar, nunca olvidar, a los pseudo revolucionarios que acumulaban riqueza apropiándose de hogares de “otros”, en nuestro lejano Sur).
No queremos más feudalismo nacional ni provincial, sino respeto a la vida, al otro y a la vida en democracia. Esa democracia que recuperamos con muchas muertes, para todos.
Nunca Más. Con Nosotros NO.